El jueves 11 de abril, Ariana Grande compartió una importante historia en Instagram: en ella, se mostraba el escáner cerebral de un cerebro sano junto a otro de un cerebro con trastorno por estrés postraumático (TEPT). Debajo de esta imagen, muestra la de su propio cerebro, que tiene iluminadas las mismas áreas que el cerebro con este problema de salud mental.
Su comentario fue que la imagen era «divertida y terrorífica», pero, a pesar de su reacción tan poco seria, también agregó que no era una broma. Grande sufre de TEPT desde el ataque terrorista que sufrió en uno de sus conciertos, en Manchester, Reino Unido, en 2017. «No creo que alguna vez sepa hablar de eso sin llorar».
El jueves 11 de abril, Ariana Grande compartió una importante historia en Instagram: en ella, se mostraba el escáner cerebral de un cerebro sano junto a otro de un cerebro con trastorno por estrés postraumático (TEPT). Debajo de esta imagen, muestra la de su propio cerebro, que tiene iluminadas las mismas áreas que el cerebro con este problema de salud mental.
Su comentario fue que la imagen era «divertida y terrorífica», pero, a pesar de su reacción tan poco seria, también agregó que no era una broma. Grande sufre de TEPT desde el ataque terrorista que sufrió en uno de sus conciertos, en Manchester, Reino Unido, en 2017. «No creo que alguna vez sepa hablar de eso sin llorar»
Cuando el TEPT fue diagnosticado por primera vez, ocurrió en un veterano de guerra. Pronto se la conoció como la enfermedad de la guerra, y hasta el día de hoy muchas personas creen que solo quienes vivieron esta experiencia pueden tener estrés postraumático. La realidad es que es mucho más común en mujeres que sufrieron abusos sexuales, y que las experiencias que desembocan en TEPT pueden ser variadas. Las causas de que el TEPT se desarrolle en algunas personas y no en otras son desconocidas.
Si bien la mayoría de las personas, después de vivir una situación traumática, tienen dificultades pasajeras para continuar con sus vidas de manera normal, si estos síntomas persisten o incluso empeoran a través de los años, es posible que estés frente al trastorno.
Síntomas
De acuerdo a la clínica, los síntomas del trastorno se dividen en cuatro tipos: recuerdos intrusivos, evasión, cambios negativos en el pensamiento y el estado de ánimo y cambios en las reacciones emocionales y físicas.
Entre los recuerdos intrusivos, se encuentran las reviviscencias recurrentes del del hecho traumático, completamente involuntarias y generadoras de una gran angustia. Se puede llegar a revivir el evento traumático de forma tan vívida como si estuviera sucediendo otra vez. Además de recordarlo despiertas, las personas con TEPT pueden tener pesadillas, muchas veces recurrentes, sobre el evento. Por último, cuando se revive el evento, los individuos pueden llegar a manifestar angustia o reacciones físicas ante el desencadenante del recuerdo.
Quienes sufren de estrés postraumático también tienden a evitar hablar sobre el evento o pensar en él, esto último muchas veces sin suerte. También evitan lugares, actividades o personas que revivan la memoria del hecho.
Las personas con TEPT pueden tener cambios negativos en el pensamiento y el estado de ánimo: pueden comenzar a pensar negativamente sobre sí mismas, sobre otras personas o el mundo, y destruir sus esperanzas sobre el futuro. Aunque los recuerdos se manifiesten vívidos, pueden evitar recordar aspectos importantes del hecho traumático.
Como consecuencia, pueden verse con dificultad para mantener sus relaciones o sentirse distante de sus seres queridos. Pueden abandonar actividades que antes les gustaban. En sí, pueden tener mucha dificultad para sentir emociones positivas o sentirse emocionalmente apagados.
Los cambios en las reacciones físicas y emocionales también se llaman síntomas de excitación, ya que se trata de reacciones bruscas, como asombrarse o asustarse fácilmente, dado que se está siempre alerta al peligro. Las personas con TEPT pueden tener irritabilidad o conducta agresiva en momentos repentinos.
También pueden comportarse de manera autodestructiva. Pueden tener problemas para dormir y dificultad para concentrarse. La culpa y vergüenza que sienten hacia el evento se puede hacer continua, y llegar a ser abrumadora de a momentos.
Los síntomas del TEPT varían en intensidad con el tiempo y pueden ser agravados por experiencias que revivan la memoria del trauma.
Tratamiento
La mayoría de los pacientes con TEPT se benefician de la psicoterapia. Acudiendo a sesiones de terapia psicológica, las personas pueden aprender habilidades para enfrentar los síntomas y para pensar mejor sobre sí mismas, los demás y el mundo. En las sesiones también se tratan los problemas relacionados al trauma, como la depresión, la ansiedad o la drogadicción.
Dependiendo de la gravedad del trastorno, varios tipos de medicamentos pueden ayudar a mejorar los síntomas: entre ellos se encuentran los antidepresivos y los ansiolíticos, además de medicamentos para regular el sueño y evitar la aparición de pesadillas.
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